Comer para cambiar el mundo: cómo nuestra alimentación influye en un futuro más sostenible

Cuando pensamos en sostenibilidad, solemos imaginar reciclaje, reusar o paneles solares. Pero pocas veces miramos lo que tenemos frente a nosotros cada día: nuestro plato de comida. La verdad es que lo que comemos (y cómo lo producimos, transportamos y desechamos) tiene un gran impacto en el planeta.

El sistema alimentario global es responsable de aproximadamente un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero. Desde la deforestación para la ganadería, hasta los kilómetros que recorren los alimentos importados, nuestras elecciones alimenticias tienen un peso ecológico real.

Además, la agricultura intensiva consume el 70% del agua dulce disponible y genera pérdida de biodiversidad, erosión del suelo y contaminación de ecosistemas por el uso de fertilizantes y pesticidas.

La buena noticia es que cada comida es una oportunidad para tomar decisiones más conscientes. Aquí algunas claves:

1. Reduce el consumo de carne y lácteos

Podemos adoptar una alimentación más basada en plantas. La producción de carne, especialmente de res, genera altos niveles de emisiones y consume mucha agua. Con reducir algunas porciones a la semana, ya estás contribuyendo.

2. Elige productos locales y de temporada

Comprar frutas, verduras y otros productos cultivados cerca de tu comunidad reduce la huella de carbono asociada al transporte y apoya a productores locales.

3. Evita el desperdicio de alimentos

A nivel mundial, se desperdicia un tercio de los alimentos producidos, mientras millones de personas sufren hambre. Planifica tus compras, conserva bien tus alimentos y aprende a aprovechar las sobras.

4. Prefiere alimentos con menos empaque

Elige productos a granel o en envases reutilizables. Cada empaque que evitamos reduce residuos plásticos y demanda energética.

5. Infórmate sobre el origen de tus alimentos

Apoya marcas o iniciativas que promuevan una producción responsable: comercio justo, agricultura regenerativa o prácticas orgánicas. Hay cada vez más opciones accesibles en ferias, mercados y tiendas sostenibles.

Cambiar nuestros hábitos alimenticios no solo tiene beneficios ambientales, sino también personales: mejorar nuestra salud, conectar con lo que comemos y tomar decisiones más conscientes. Además, nuestros hábitos pueden influir en quienes nos rodean y generar un efecto multiplicador.

En un mundo con tantos desafíos ambientales, elegir lo que comemos es una forma tangible de ser parte de la solución. Porque, al final, cada bocado cuenta.

07 Agosto 2025

Medalith Juarez

Sobre Recidar

Somos una empresa social peruana que fomenta la economía circular. Promovemos la Reutilización para la Inclusión, dando una segunda vida a objetos en desuso donados por empresas y familias, creando un sistema sostenible que permite generar acceso legal y digno a bienes necesarios para personas viviendo en pobreza urbana en Lima y a su vez mitigando la contaminación de nuestra ciudad. Para donar escríbenos al whatsapp +51 946 095 818.

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